lunes, 29 de junio de 2009

PRESOS POLITICOS

QUE QUEREMOS LOS PRISIONEROS POLITICOS

Desde las cárceles de Colombia

En el contexto histórico de las luchas libradas por los pueblos en la búsqueda de su libertad, algunos nos hemos atrevido dando lo que mas podemos para acompañar los diferentes procesos sociales. Aquel que adquiere conciencia a favor de las mayorías aporta desde donde este sin importar las circunstancias en las que se encuentre.

Hoy hacen historia millones de hombres y mujeres forjando el futuro para las nuevas generaciones en medio de la constante pugna de una clase que desde siempre ha detentado el poder económico y político del país obedeciendo al imperialismo Norteamericano en alianza con los terratenientes, gremios económicos, la mafia y el paramilitarismo que han hecho del Estado un instrumento de dominación para la explotación del pueblo colombiano y la represión a través de las Fuerzas Militares y sus planes de “seguridad” de la organización social y popular . Estas condiciones obligan a la población a organizarse en torno a un ideario político que trasforme esta realidad y permita la construcción de un nuevo modelo social, político, cultural, y económico con principios de solidaridad, igualdad, justicia social y autodeterminación de nuestro pueblo como eje rector de su propio destino.

Es así como los prisioneros políticos somos hombres y mujeres con posición política definida por nuestra condición de integrantes de la clase trabajadora en oposición al sistema capitalista y a todas sus políticas que en detrimento del bienestar social han promovido la cada vez mayor, acumulación de l riqueza en pocas manos, la pobreza miseria y el marginamiento de las mayoriítas. Como luchadores sociales empuñamos las banderas de la paz, pero con justicia social en defensa de los intereses del pueblo Colombiano.

Somos trabajadores de una Nueva Colombia y tejedores de una nación soberana y libre:

Propendemos por la organización de los sectores más desprotegidos para defender sus derechos y así trasformar la realidad a través de un proyecto político revolucionario donde el poder sea de el y para el pueblo: Hoy somos más de siete mil prisioneros políticos retenidos por el Estado por nuestra condición de rebeldes. Queremos reconocimiento del conflicto armado interno que determina que nuestra condición de prisioneros políticos con derecho a disentir. Queremos un intercambio humanitario con garantías de seguridad, con estructura política y derechos políticos a fin de recuperar nuestra libertad, poder hacer lo que queremos correcto, poder abrazar y compartir con nuestros seres queridos. Queremos seguir construyendo un país que brinde garantías políticas y bienestar social. Queremos respaldar y apoyar la iniciativa de los movimientos sociales que proponen la revocatoria del mandato de ALVARO URIBE VELEZ, en la búsqueda de una salida política al conflicto. URIBE, debe renunciar.

Queremos que haya respeto a la vida e integridad física y psicológica de las personas que pensamos de manera opuesta al gobierno, en caso de ser violados estos derechos abrir y adelantar los procesos jurídicos correspondientes para que sean castigados los directos responsables.

Queremos que no se promuevan programas de sometimiento a costa de renunciar a nuestros principios y convicciones. Queremos que se inicien investigaciones por parte de la Procuraduría y la Fiscalía sobre las muertes de compañeros en las prisiones y luego de recobrar su libertad con la intervención de organismos internacionales como garantes.

Queremos que las mujeres con hijos menores de edad puedan gozar de arresto domiciliario, así sus procesos estén en Juzgados Especializados. Queremos que se replantee las políticas carcelarias, que se promueva la construcción de cárceles de máxima seguridad que atentan contra la dignidad del ser humano.

Queremos que en las cárceles tengamos derecho de pensar, opinar, escribir y contar nuestras experiencias, quereres y sentirse. Queremos la libertad para disfrutar de las cosas sencillas, de la vida, compartir con quienes queremos en una patria propia, justa, sin la amputación a la libre expresión y al creer en un mejor mañana.

“Si hay alguna violencia justa, es aquella que se emplea en hacer a los hombres buenos, y por consiguiente felices, y no hay libertad legitima, sino cuando esta se dirige a honrar la humanidad y perfeccionarle su suerte”

Simón Bolívar

No hay comentarios: